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Heridas de la piel y los tejidos subyacentes por causa de una presión continua entre el hueso y una superficie externa, que disminuye la corriente sanguínea hacia la piel y los tejidos, dificultando el transporte de oxígeno, alimentos y residuos. Esto compromete la circulación sanguínea de la zona, con la consiguiente isquemia y daño tisular (necrosis e infección).
Las llagas aparecen sobre los puntos de apoyo del cuerpo tumbado (sacro, talones y caderas), pueden ser muy dolorosas y se infectan fácilmente.
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| Tratamiento con magnetoterapia para aliviar el dolor, evitar/controlar la infección y lograr rápida cicatrización de heridas |
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La Terapia con Magnetofield es muy recomendable para personas sometidas a inmovilización prolongada, incluso como medida preventiva, pues la presión y las complicaciones en el riego sanguíneo van deteriorando los tejidos.
Aporta una significativa mejoría desde las primeras sesiones:
-Acelera el proceso de cicatrización, impidiendo que las llagas lleguen a niveles de mayor gravedad: se reducen los bordes de la herida y tiende al cierre, evitando la continuidad del daño tisular y/o necrosis.
-Control del dolor y la infección.
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